El thriller psicológico Vertige y el drama policial Street Justice que forman parte del catálogo con guion del distribuidor y creador de contenido irsraelí, Armoza Formats, han conseguido ventas para sus versiones finales en dos territorios europeos.
"Estamos encantados de llevar estos increíbles dramas a nuevos territorios. Tanto Vertige como Street Justice están llenos de suspenso, intriga y traición, proporcionando un fuerte atractivo y fascinación para el público de todo el mundo", declaró Avi Armoza, CEO de Armoza Formats.
La miniserie dramática Vertige, producida por Pixcom, ha sido vendida al grupo de medios español Euskal Irrati Telebista (EITB), que recogió el producto final para su red ETB.
Vertige (6 X 60') fue emitida originalmente por TVA y Series+ de Canadá, y sigue la historia de una joven que despierta después de tres meses en coma, sin recordar lo que ocurrió durante las 24 horas previas a su presunto intento de suicidio. Rechazando creer que trató de quitarse la vida, intenta reconstruir lo que realmente sucedió y se da cuenta de que no puede confiar en nadie, ni siquiera en su familia más cercana. Mientras reconstruye el rompecabezas, descubrirá secretos, mentiras y la verdad indescriptible encerrada en su memoria. A medida que se revela cada nueva pieza del rompecabezas, se descubre otra capa de la historia, en un thriller psicológico intenso, impredecible y vanguardista.
Además, las tres temporadas del aclamado drama israelí, Street Justice, han sido encargadas por el broadcaster ucraniano2+2, un canal propiedad de 1+1 Media Group.
Street Justice (25 X 60'), desarrollada por Artza Productions, ya ha sido transmitida por Channel 10 de Israel y Globosat de Brasil.
La trama permite desdibujar las líneas entre legalidad y justicia, en una serie repleta de indetenible acción, explosiones, peleas de armas, crímenes arriesgados, persecuciones de automóviles y romance peligroso. El protagonista es un detective que no tiene la paciencia de esperar a que los criminales cometan errores, sino que toma la ley con sus propias manos.
